En 2024, el mercado latinoamericano de scooters eléctricos alcanzó un valor aproximado de USD 19,31 millones. Se calcula que el mercado crecerá a una tasa anual compuesta del 8,5% entre 2025 y 2034, para alcanzar un valor de 40,23 millones de USD en 2034. Este crecimiento sostenido pone de manifiesto el avance de la movilidad eléctrica en América Latina, una región que busca alternativas sostenibles, eficientes y accesibles frente a los desafíos del transporte urbano.
Una respuesta urbana a los retos de movilidad
Las grandes ciudades latinoamericanas enfrentan problemas de congestión, contaminación y transporte público saturado. En este contexto, los scooters eléctricos se han convertido en una opción de movilidad personal ideal: son ágiles, no contaminan, tienen bajo costo operativo y se adaptan fácilmente al entorno urbano.
Ciudades como Ciudad de México, Bogotá, Santiago de Chile, São Paulo y Buenos Aires ya han comenzado a integrar este tipo de transporte, tanto en manos de usuarios particulares como a través de modelos de micromovilidad compartida.
Factores que impulsan el crecimiento del mercado
Conciencia ambiental y cambio climático: Los gobiernos y los ciudadanos están cada vez más comprometidos con reducir las emisiones de carbono, y los scooters eléctricos ofrecen una alternativa real para la movilidad sostenible.
Expansión del e-commerce y delivery urbano: Las empresas de entregas rápidas, especialmente en alimentos y mensajería, están adoptando scooters eléctricos por su eficiencia, ahorro y facilidad de circulación.
Costo accesible y mantenimiento bajo: En comparación con motos tradicionales o autos, los scooters eléctricos requieren menor inversión inicial (en algunos modelos) y menos mantenimiento.
Apoyo de políticas públicas: Algunos gobiernos locales han implementado incentivos fiscales, subsidios y regulaciones favorables para promover el uso de vehículos eléctricos ligeros.
Segmentación del mercado
Por tipo de scooter:
Scooters eléctricos personales
Scooters eléctricos compartidos (rental/micromovilidad)
Scooters eléctricos para delivery/logística
Por tipo de batería:
Batería de litio (la más común por su durabilidad y carga rápida)
Batería de plomo-ácido (menos frecuente, usada en modelos más económicos)
Por país:
México lidera en adopción gracias a su ecosistema emprendedor y políticas urbanas.
Brasil y Colombia muestran fuerte crecimiento en el uso comercial y compartido.
Chile y Argentina se destacan por proyectos piloto e infraestructura de carga.
Desafíos para la consolidación del mercado
Aunque el crecimiento es positivo, existen retos importantes:
Infraestructura insuficiente: La falta de ciclovías seguras, estaciones de carga y estacionamientos adaptados limita el uso masivo de scooters eléctricos.
Regulación variable: En algunos países o ciudades, aún no existe una legislación clara sobre el uso, circulación y seguridad de estos vehículos.
Costo de importación: Muchos scooters eléctricos son importados, lo que puede elevar los precios debido a aranceles o costos logísticos.
Durabilidad y reciclaje de baterías: El manejo responsable del ciclo de vida de las baterías aún es un punto débil en muchos países de la región.
Oportunidades de expansión
Programas de micromovilidad compartida: Empresas privadas, en alianza con gobiernos, pueden desplegar flotas de scooters eléctricos en zonas urbanas para transporte público alternativo.
Fabricación local y ensamblaje regional: Desarrollar capacidades productivas dentro de Latinoamérica reduciría costos y generaría empleos.
Integración con apps y servicios digitales: El uso de plataformas móviles para alquiler, pago, geolocalización y mantenimiento puede facilitar la adopción masiva.
Educación vial y promoción del uso responsable: Campañas de concientización pueden mejorar la seguridad y aceptación social del scooter eléctrico como medio de transporte.
Conclusión
El mercado latinoamericano de scooters eléctricos está en una fase de crecimiento sólido y con gran potencial de expansión en los próximos años. A medida que las ciudades buscan soluciones más limpias y prácticas para la movilidad urbana, estos vehículos se posicionan como una opción cada vez más atractiva para individuos, empresas y gobiernos. Con un futuro que apunta a duplicar su tamaño para 2034, los scooters eléctricos no solo representan una tendencia tecnológica, sino también una respuesta real a los desafíos de las ciudades del mañana.